1. Mezclá los huevos y el azúcar. Incorporá la harina tamizada con el polvo para hornear, la leche y mezclá. Debe quedar una pasta densa.
2
2. Calentá una sartén de teflón o una plancha enmantecada. Verté la preparación por cucharadas separadas unas de otras. Una vez que comiencen a burbujear y estén doradas, giralas para que terminen de cocinarse.
3
3. Servilos tibios acompañados con Leche Condensada.
Comentarios
(0)
¿A quién consentiste con esta rica receta? Cuéntanos cómo te quedó.